miércoles, 28 de agosto de 2013

Masks


¿En que fue diferente este Eliseo del anterior? En todo, y en especial porque yo ya no soy la misma. ¿Qué quedó de la Lindsey que saludaba a todos y conversaba con todos? Nada. ¿Qué quedó de la Lindsey alegre que quería llevarse bien con todos los suyos? Nada. Solo una copia burda con una máscara de hipocresía...
No saludé a nadie, excepto a aquellos que saludó Arlene, simplemente porque estaban ahí y no porque quería hacerlo. A la que sí saludé fue a Cassandra quien me presentó a Anton, y junto a ellos conocí a Emanuel Riddle, uno de los nosferatu, que también sabía de mi situación... Un ex detective, que ahora era prácticamente infalible... quizás ellos pudieran proporcionarme protección extra... 
Creo que la única que me saludó directamente fue Erika, el resto no me saludó, y fue mejor así, la realidad es que yo no quería saludar a nadie, ni siquiera a Katy y a mis congéneres los Toreador... pero tampoco quería traerle problemas a mi Sire, así que saludé a todos y posteriormente volví junto a Arlene. Creo que de todos los que estaban allí la única que no se había puesto una máscara conmigo era ella.
El príncipe preguntó si alguien sabía algo sobre Gabriel, nadie dijo nada y yo tampoco. Estaba bastante asustada como para querer decir algo y tampoco tenía pruebas contra Dante como para acusarlo de nada, ¿además, de qué me iba a servir acusarlo? ¿Para desatar una guerra entre su clan y el mío? No, ya bastante teníamos con los gangrel...
El chiquillo del primogénito cometió una falta atroz, en medio de una discusión sobre los territorios de caza entre su clan y el nuestro sacó sus garras en el Eliseo... me pregunté si a alguien beneficiaba toda esa situación, pero ahora era como estar viendo todo por la televisión. No quería formar parte de nada de eso, no me interesaba... 
El castigo del príncipe al primogénito Gangrel fue bastante menor, Katy pidió los territorios para nosotros y él no pudo decir nada. Además la sentencia fue que le cortaron un brazo frente a todos. Demasiado poco para falta tan grave... 
La fiesta hipócrita continuó su rumbo con el baile, Arlene estaba bailando con Bryce y yo simplemente me quedé en un costado, no tengía ganas de bailar, no tenía ganas de nada... alguien me tendió una mano, era Dante. Creo que jamás había sentido tanto desprecio por alguien, jamás hasta ese momento había odiado a nadie como lo estaba odiando a él. Estaba jugando conmigo, jugando su jueguito. Pero yo no iba a perder, si él quería jugar ese juego, estaba bien. Puse mi mejor sonrisa y bailé como nunca, mi máscara fue una de las mejores, porque fue la primera. Por primera vez me habían obligado a ser alguien que no era, por primera vez tuve que falsear lo que realmente estaba sintiendo...
No bailé con nadie más, solo miré la pista, a Arlene que bailaba con Bryce sin máscaras. 
Hasta que sentí algo... algo malo iba a pasar, en lo primero que pensé fue en avisarle a Arlene, que parecía que no se había percatado. Me acerqué a ella mientras bailaba en la pista y le advertí justo a tiempo.
En pocos segundos por las ventanas comenzaron a entrar soldados, parecían SWAT, pero no tenían ningún distintivo. Arlene que había sido más rápida que lo que habían podido ver mis ojos me señaló una salida, y yo estaba dispuesta a salir, pero Bryce dijo que no iba a abandonarla, y... tenía razón... Arlene no me había abandonado cuando más la había necesitado, yo tampoco iba a irme de allí. Bryce y yo estábamos a cubierto y cuando se nos acercaron vi la forma que tenía Bryce de pelear, se sacaba la piel como si fuera un guante y usaba como arma sus propios huesos... algo bastante desagradable, pero efectivo. No duró mucho el combate porque con la llegada de los gangrel enseguida dieron cuenta de todos, pero habíamos perdido a 20 de los nuestros. 
Aparentemente eran de un grupo de cazadores, tenían un colgante con un símbolo extraño, y el príncipe dijo que iba a armar grupos para que nosotros los cacemos a ellos. Iba a asignar territorios que cada grupo debía patruyar y limpiar de estos cazadores, y en esos territorios tendríamos derecho de caza. Eso parecía bastante complicado, pero como lo había ordenado el príncipe, nadie dijo nada. 
Pensé que todo lo que había tenido hasta ese momento se desmoronaba. Esa "patrulla" mataba mi sueño de una carrera, componer los temas para mi nuevo cd, mi vida cambiada de ser una artista arriba de un escenario a ser una agente de limpieza del príncipe en algún territorio perdido por ahí, mientras estaba rodeada de los míos cuando no podía confiar en ellos...
¿Si hubiera sabido que esto iba a pasarme hubiera elegido ser así? ¿Hubiera elegido esta vida? Sí, estoy segura que la hubiera elegido, solo para estar con ella para siempre, pero parece que ahora le importo menos que nada... 
Tengo que olvidarme de eso, tengo que seguir con mi vida, si sigo pensando en ella lo único que voy a lograr es perderme en la tristeza y en la soledad... ¿Era eso lo que le había pasado a Gabriel? ¿Se había vuelto loco por la tristeza y la soledad? ¿Se había vuelto loco por ella? Quizás...

Solo esperaba que Arlene y yo estuviéramos en el mismo grupo, ella es la única en quien puedo confiar ahora... 

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